Hasta cuándo?

En el mes de Julio, en ocasión de ir representando a APTTA a San Rafael, Mendoza para dar una capacitación sobre Seguridad Vial organizada junto a OSDE, todavía quedaban caras tristes sobre el tremendo impacto que había causado la muerte de Dimas Buere, Emiliano Albornoz y Germán Vergara, producto de un siniestro de tránsito sobre la Ruta Nacional 143 a eso de las 7 de la mañana de un primero de Mayo de este año. Aparentemente los chicos que tenían entre 20 y 22 años volvían de divertirse junto al conductor que sobrevivió.

En los menores de 35, este tipo de hechos se constituye en su primer causa de muerte. 

Algunos factores que explican esto en jóvenes y adolescentes son:

-          Rebeldía, y la falta de límites que están impuestos en todo sentido.

-          Omnipotencia de la edad, es decir, a los 20 años uno no cree que puede morirse, tiene “toda la vida por delante”

-          Falta de experiencia en la conducción, como en este caso muchas veces los siniestros no tienen participación de otro vehículo, simplemente se han pasado los límites que la física nos impone en el mundo terrenal.

-          Son Influenciables, al salir en grupo sobre todo se exceden en los límites por el hecho solamente de pertenecer y sentirse que son importantes en el grupo.

-          Falta de educación en el tema! Pese a que existen leyes de educación vial, no se aplica de manera sistemática por parte del estado.

-          Anomia generalizada. Como sociedad tenemos esa debilidad de creer muchas veces que el respeto a las normas es para los demás, o… ¿Cruzamos siempre por la esquina, o a veces lo hacemos por mitad de cuadra?

Pero… También debemos tener en cuenta el rol del estado: Debe construir y mantener caminos que puedan “dispensar el error”, debe disculpar, perdonar, estar preparado, por si el usuario se equivoca (no importan en este momento los motivos, eso lo discutimos luego, pero necesitamos que no se mueran sin sentido, Verdad?)

En la salida de la curva donde perdieron la vida estos chicos, sobre ese tramo de la RN 143, hay un árbol.

Y no es un árbol deletable que según la Ley Nacional de Tránsito “Se entiende por deletabilizar, hacer que una cosa pierda o disminuya su condición de peligrosa o que resulte inocua.”

Es cierto que el árbol está fuera de la banquina… Pero asimismo representa un peligro para todos los que circulen por esa zona… Supongamos señores funcionarios que en vez de un árbol, fuese un precipicio a la salida de la curva… No se colocan barandas de contención???

Conclusión, si es que no se quiere quitar esa muestra imponente de la naturaleza (el árbol). Le pueden poner una baranda al menos por si se equivoca otro conductor, digo al menos para que lo contenga y reincorpore a la vía.

Esto ocurrió un primero de Mayo, Día internacional del trabajo, sería bueno que las autoridades de las que depende ese “arbolito”, hagan honor a ese día por lo que significaron los mártires de Chicago o simplemente por la memoria de los chicos. Sobre todo… Para que no ocurra otra vez.

Lic. Axel Dell’ olio

axeldellolio@hotmail.com

@axeldellolio